Utilizamos cookies propias y de terceros para mejorar nuestros servicios y mostrarle publicidad relacionada con sus preferencias mediante el análisis de sus hábitos de navegación. Puedes obtener más información acudiendo a nuestra política de cookies.

Pulse el botón aceptar, para confirmar que ha leído y acepta nuestra política de cookies. Después de aceptar no volveremos a mostrar este mensaje.

Cómo elegir la resistencia adecuada en clases de cicloindoor

...Sígueme, ven conmigo...vamos a conseguir esto juntos. Es un momento de superación que tienes que alcanzar, ¿preparado? ¡resistencia alta!” “...nos espera un gran camino por delante, así que aprovéchalo y con tu resistencia media disfruta del recorrido, actívate y entra en la sesión dándote tiempo para prepararte...”

¿Nos suena verdad? Y es que nosotros lo vemos claro: resistencia baja, media baja, resistencia media, media alta y resistencia alta, pero lo cierto es que muchos de vosotros os habéis acercado en alguna ocasión a decirnos cosas como: “oye, ¿cuántos puntos son resistencia media?” o “Yo le doy tres vueltas pero puedo darle más, ¿cuántas le doy?

Así que, hemos considerado oportuno escribir un artículo que explique la importancia de saber adaptar la resistencia en tus clases de cicloindoor.

Lo primero a tener en cuenta es que no todas las máquinas son iguales. Ni siquiera 2 bicis que sean totalmente iguales calibran igual. El tiempo, el uso y el mantenimiento, hacen que las bicis cambien. No es fiable confiar la resistencia de nuestro entrenamiento al método de ajuste de una bici en concreto.

Por otro lado, nuestra percepción del esfuerzo varía. Esto significa que, a medida que vamos entrenando, nos cuesta menos. Lo que al principio nos costaba mucho ahora vamos sintiéndonos mejor y más cómodos en resistencias que antes no podíamos seguir. Otro motivo más por lo que establecer las diferentes resistencias en puntos o vueltas concretas, no es adecuado.

Además de esto, nosotros mismos no siempre nos encontramos igual. A veces tenemos días buenos y a veces no tan buenos. Seguramente haya habido clases en las que te has sentido muy fuerte y otras que te ha costado el simple hecho de subiros a la bici. Establecer resistencias fijas puede sin duda desmotivarnos en estos días más débiles y es preferible que evitemos eso.

Por último, algo por lo que nosotros apostamos mucho: el principio de individualización. No podemos obviarlo. Cada persona es diferente y requiere de atenciones diferentes, en función de sus características. Lo que para alguien asiduo a las clases es resistencia media puede ser fácilmente resistencia alta para una persona que acaba de empezar, o resistencia baja para una persona ya entrenada. Esto es lo más importante de todo, lo que nunca se nos puede olvidar como instructores y siempre debemos de tener en cuenta como alumnos. Si no podemos con una resistencia determinada, la adaptamos.

Visto esto, parece obvio establecer un método que nos ayude a calibrar de manera correcta las resistencias y ese método no es otro que trabajar por sensaciones, por supuesto, teniendo en cuenta lo que hacemos, valorando cómo nos sentimos con cada resistencia y como respondemos al esfuerzo ante ella.

Pongamos como ejemplo, nuestro sistema de trabajo. Toda la resistencia dividida en 5 valores progresivos de menos a más. Este sistema es parte de nuestra metodología, a nosotros nos funciona muy bien y es muy fácil de entender. 

¿Cómo identifico mi resistencia?

Llegados a la conclusión que las sensaciones deben ser las que nos marquen la resistencia, esto es lo que deberíamos de buscar en cada una de ellas:

  • Resistencia Baja: Sensación fácil, sin esfuerzo, muy cómoda. Notamos la resistencia pero muy ligeramente.

  • Resistencia Media Baja: Un poquito más que la baja pero sin dejar de ser fácil, sin que se produzcan grandes estímulos y sin fatiga. Una resistencia que comience a activarnos de manera suave.

  • Resistencia Media: Sensación de resistencia que podemos mover pero sin cansarnos, notamos la resistencia, nos frena y somos nosotros los que movemos la máquina, no la simple inercia. No es molesta y podemos mantener un ritmo respiratorio medio. Una resitencia que podríamos mantener un tiempo largo a una velocidad no muy alta.

  • Resistencia Media Alta: Aquí las sensaciones ya son de esfuerzo. La resistencia tiene peso y aunque la movemos, debemos estar concentrados en ello. Resistencia desafiante que implica mover las piernas fuertes para seguir el ritmo. La sensación, no obstante, es que podríamos mover un poco más aún, pero no mucho más. Es una resistencia de trabajo ya importante.

  • Resistencia Alta: Es la máxima resistencia que somos capaces de mover. La sensación es de pesadez. No es una resistencia fácil y no podemos mantenerla mucho tiempo a un mismo ritmo. Es una resistencia dura y de superación y debemos buscarla así para que nos lleve al límite de nuestras posibilidades.

Una vez tengamos esto claro, hay que añadir que todo esto hay que adaptarlo a la cadencia de pedaleo que llevemos en ese momento. Al ritmo de la música que estemos pedaleando. Hay que procurar seguir siempre el ritmo, mantener la cadencia y luego centrarnos en la resistencia.

Esperamos con esto haber aclarado, al menos un poquito, tus dudas sobre cómo calibrar la resistencia.  En cualquier caso, si estás suscrito a Bestcycling TV en los primeros pasos tenemos un vídeo donde explicamos también el concepto que aplicamos de resistencia en Bestcycling

Puedes descargar la app de forma gratuina aquí

¡Practica Bestcycling!